Queremos resaltar en este artículo la importancia de entrenar la fuerza muscular que influye en la salud de todo tu cuerpo, esto no significa que debas ser musculos@ y que tengas que ir directo al gimnasio, queremos que, tengas más información para que aprendiendo sobre el funcionamiento del cuerpo puedas adquirir hábitos saludables, que puedas evaluar tu estado e incorporar lo que te brinde más salud de la manera que más lo disfrutes.

 

¿Qué es la fuerza muscular?

Se puede definir la fuerza muscular la capacidad que tiene un músculo de desarrollar tensión contra una carga en un único esfuerzo durante la contracción.

El cuerpo humano tiene muchos músculos desde el rostro hasta nuestras piernas, si pensamos en la estructura ósea y órganos, podemos imaginar que los músculos son los que pueden cargar con ellos durante todas los movimientos y actividades que hacemos, por decirlo de alguna manera, con su fuerza básica cargamos nuestro propio peso.

 

Ser fuertes

La capacidad de los músculos se da por las acciones que hacemos con ellos, por ejemplo, levantar o mover objetos, caminar o subir escaleras, montar en bicicleta, etc. Aumentar la fuerza requiere un esfuerzo extra al que se hace con nuestro propio peso y es esto lo que nos hace desarrollar una fuerza muscular superior a la que los músculos están acostumbrados.

Hace miles de años cuando el hombre hacia todas las actividades para su supervivencia, usaba su cuerpo para todo, no existía el sedentarismo y obviamente su cuerpo era su capacidad de fuerza además de los animales si contaba con ellos, lo que queremos anotar con esto, es que en esta era en la vivimos hacer fuerza no es lo más común pero la fuerza muscular es necesaria para mantener la salud de todo el cuerpo.

Fuerza muscular y salud

El ejercicio que se realiza para aumentar la fuerza muscular optimiza la salud cardiovascular a través de mecanismos no tradicionales, como la liberación por los músculos esqueléticos de sustancias saludables para el corazón –denominadas mioquinas– o la mejoría de la microbiota intestinal.  El metabolismo incluso se verá positivamente afectado logrando balancear mejor todas recciones químicas, obviamente cuidando tambien la alimentación.

Cuando entrenas la fuerza muscular levantando pesas, utilizas los músculos para levantar esos kilos de más (este concepto se denomina resistencia). Así fortaleces e incrementas la cantidad de masa muscular de tu cuerpo, haciendo que tus músculos trabajen más duro de lo que están acostumbrados a trabajar.

Para entrenar la fuerza muscular o la salud de los músculos no tienes que correr a levantar muchos kilos de más, basta con que te esfuerces haciendo un poco más de fuerza y verás como con el tiempo se incrementa la capacidad muscular, así que lo que alzabas antes se te volverá normal e lo mejor es irlo incrementando, de esta manera los músculos ganan tono y masa.

Pérdida de fuerza muscular es pérdida de salud

Es importante que ésta sea una practica durante todos los años de tu vida ya que los músculos a partir de los 50 años, si no son estimulados y entrenados, comenzarán a perder su densidad y por ende su fuerza, a esto se le llama sarcopenia, término referido a la pérdida de masa muscular que ocurre con el envejecimiento.

La sarcopenia representa un factor de riesgo de fragilidad, pérdida de independencia y discapacidad física, relacionándose con múltiples comorbilidades en ancianos como caídas, declive funcional, osteoporosis, alteración de la termorregulación e intolerancia a la glucosa e incluso es un predictor de discapacidad y mortalidad por todas las causas en avanzada edad. La pérdida de movilidad resultante de la pérdida muscular predice mayor discapacidad física y mortalidad, asociada a una peor calidad de vida, mayor soporte social y de cuidados de salud.

La fuerza muscular y la longevidad

La buena noticia es que hoy podemos ver ejemplos maravillosos de los resultados del entrenamiento de la fuerza, hombre y mujeres de más 50 años gozan de cuerpos sanos y saludables cuya edad biológica está por debajo de su apariencia gracias a la su práctica constante, incluso adultos mayores entre 60 y 70 años resgistran pérdida por debajo de los porcentajes estándares de la pérdida de masa muscular, el factor común entre ellos es que han mantenido una rutina de ejercicio que incluyen la fuerza muscular.